La contaminación de organismos por metales pesados, hidrocarburos, entre otros, es un tema prioritario en los estudios ambientales marinos y continentales.

En base a un contexto de sanidad e inocuidad en toda la cadena productiva de la actividad pesquera y acuícola, y con el propósito de proteger el estado ecológico y la salud pública, The Environment Management gestiona la planificación y la ejecución de biomonitoreos en organismos de importancia socioeconómica y de diversos niveles tróficos generando el sustento científico para proponer las soluciones más efectivas a las emergencias ambientales.

En el caso de los metales que se producen de forma natural en el medio ambiente, la industrialización, la escorrentía de tierras agrícolas, la producción de petróleo y gas, el desarrollo turístico y las fuertes lluvias durante todo el año han provocado grandes cantidades de metales pesados en los ecosistemas acuáticos (Li y Zhang, 2010; Varol et al., 2013; Zhang et al., 2016). Uno de los problemas asociados con la persistencia de los metales pesados ​​es la bioacumulación y la biomagnificación lo que resulta en riesgos persistentes tanto para la salud humana como para el ecosistema (Rahman et al., 2012; Kalantzi et al. 2013). El riesgo de salud para los humanos debido a la gran exposición a través del consumo de alimentos es común en las áreas ribereñas y marinas (Li y Guo, 2011; Leung et al., 2014). La toxicidad de los metales pesados ​​en los productos de pesca es un problema grave en todo el mundo, especialmente en los países en desarrollo (Rumisha et al., 2012; Taweeln et al., 2013; Zhang et al., 2016).

Por otro lado, dentro de los efectos que pueden producir el petróleo (todas las fracciones) en los organismos de agua dulce y marinos, el más evidente es la letalidad especialmente en zonas cercanas a derrames, ya que alteran el funcionamiento de las branquias, provocando muerte masiva por asfixia, además de efectos subletales reflejados en los cambios de hábitos alimenticios, migratorios, reproductivos (Ponce & Botello, 2005).